En lo que va del año, desde enero hasta los primeros días de octubre, se han registrado alrededor de 430 a 450 siniestros de todo tipo en la provincia.
Esta cifra representa un aumento alarmante del 40% en comparación con el año anterior, cuando se reportaron 660 siniestros en la Ruta 7, con un saldo de 21 fallecidos y más de 300 leves lesionados.
Hasta la fecha, en la Ruta 7 se han registrado ya nueve muertes, lo que pone de manifiesto el creciente riesgo en las vías de la provincia.
A nivel provincial, el total de muertes ha alcanzado las 39, lo que subraya la gravedad de la situación.
Normalmente, la provincia presenta entre 4.300 y 4.500 siniestros viales anualmente, y las estadísticas actuales indican que este año podría superar esos números si la tendencia continúa.