El Secretario de Fruticultura señaló que continúan los relevamientos por el temporal que afectó a los valles productivos con fuertes lluvias y granizo. Según anticipó, la emergencia climática se declarará antes de fin de año en los ámbitos provincial y nacional para habilitar medidas de acompañamiento.
Detalló que el trámite administrativo ya está en curso y que se mantiene diálogo con el Gobierno Nacional para aplicar los instrumentos previstos en la Ley Nacional de Emergencia Agropecuaria, que incluye beneficios impositivos y asistencia directa. La declaración requiere la finalización de los informes técnicos en chacras y predios dañados.
El temporal dejó un registro excepcional, con 48 a 50 milímetros de agua en alrededor de 90 minutos, además de granizo y viento. En las próximas horas se esperan precisiones sobre el nivel de afectación.
La situación es especialmente compleja para la cereza, en etapa de cosecha, donde la lluvia directa provoca rajaduras por absorción de agua. También se reportan daños en pera y manzana.
El funcionario advirtió que estos episodios muestran un patrón creciente, con granizo fuera de temporada, temperaturas inusuales para noviembre y lluvias concentradas en lapsos breves. Estos cambios incrementan riesgos asociados, como incendios posteriores a lluvias y erosión en los suelos productivos.
Insistió además en la necesidad de contar con un crédito de inversión a largo plazo, con tasa del 3% y tres años de gracia, para sostener la actividad frutícola y asegurar continuidad productiva.
La Provincia continuará trabajando con organismos especializados y el sector privado para cerrar los relevamientos y activar las herramientas de asistencia. El mayor impacto se registra en cereza, pera y manzana.

