Una chica de 17 años denunció que sus compañeros de la secundaria estaban planificando violarla y tirar su cuerpo a la zanja. Ocurrió en el colegio Normal Sarmiento de Resistencia, Chaco y la joven se enteró porque le llegaron las capturas de WhatsApp en la que un grupo de amigos contaban lo que pensaban hacerle.
«Las amenazas exactamente ocurrieron el viernes 25 de marzo, en un grupo del colegio integrado por chicos de la institución. Aunque de esto me entero recién el día martes 29», describió la joven.
Según contó, se enteró de la situación gracias a un ex compañero que formaba parte del grupo de WhatsApp, donde estaban los jóvenes que planearon la violación. «Me habló (el ex compañero) y me contó todo lo que sabía. Al enterarme de las cosas que estaban escritas, fui contarle a los directivos del colegio».
Los directivos escucharon a la joven y le explicaron que «no podían hacer nada», solo «hicieron un acta comentando lo sucedido», además, «pusieron en tela de juicio la credibilidad de las palabras de mi amigo», contó.
Luego de eso, los directivos del colegio Normal llamaron a la mamá y al papá de la estudiante y le comentaron que «lo único que iban a hacer era dar una charla a todo el curso sin nombrar a los alumnos».
Insatisfechos con esa situación, se fueron de la institución y al llegar a su casa, la joven recibió capturas de pantalla de los escalofriantes chats, los cuales confirmaban lo que le había comentado su amigo y excompañero de curso.
«Lo que vi fue peor de lo que esperaba», manifestó y explicó que inmediatamente ese martes 29 por la mañana fueron a hacer la denuncia, pero no se pudo, hasta las 18 que lograron realizarla y este miércoles la presentaron en el colegio.
“La denuncia ya está radicada; quiero que se dé conocimiento de esto para que sepan con qué clase de chicos se están relacionando. Tengo miedo de lo que pueda pasar dentro o fuera del colegio, la institución se encuentra en total silencio”, escribió la chica en sus redes sociales.
Los chats de WhatsApp:
La conversación entre el conjunto de estudiantes, que fue entregada como prueba momento de realizarse la denuncia el pasado martes, inicia ya una seguidilla de malas intenciones hacia la estudiante. “Cómo falta un par de falcones verdes”, dice uno de los miembros en referencia a los secuestros realizados durante la última dictadura militar.
“Que se las lleva a las viejas y a L.” añade el mismo individuo. Luego de escribir una catarata de insultos dirigidos a su compañera, generando la risa de los integrantes del grupo, otro de ellos propone: “Vamos a violarla a L.”. “La violamos entre los 6 y después la tiramos a una zanja”, agrega uno más.
